La casa de Affalterbach despide a una de sus mejores máquinas de competición con una variante muy especial.
Mercedes-AMG ha querido despedir por todo lo alto a uno de sus modelos más laureados de sus últimos tiempos, el GT3 y lo ha hecho con una versión de ensueño para muchos, el Mercedes-AMG GT3 Edition 130Y Motorsport.
Con esta extensa nomenclatura, la firma de Affalterbach ha bautizado la que ya es la última edición de este campeón de los GT con su motor V8 atmosférico y que, casualmente, no se llegará a ver compitiendo pues se trata de un juguete para circuito limitado a 13 ejemplares.
La denominación 130Y no es casual ya que, como explica la propia AMG, hace referencia a los 130 años de la primera participación de un Mercedes en competición; la carrera París-Rouen de 1894, donde un carruaje Benz motorizado por Daimler obtuvo la victoria.
Esa inspiración racing se deja ver en la decoración del GT3 Edition 130Y Motorsport, con el dorsal 130 y varias partes en el mismo tono de azul que decoraba los 300 SL y 300 SLR que triunfaron en la Carrera Panamericana y las 24 Horas de Le Mans en los años cincuenta.
Alejado del reglamento FIA GT3, AMG aprovecha para introducir rediseños en todas las piezas aerodinámicas, como un alerón posterior más ancho que ahora incorpora un DRS el cual recibe el apoyo de un splitter frontal activo, que se despliega cuando el anterior entra en funcionamiento.
Asimismo, se aprecian otros elementos inéditos como unas llantas aligeradas en magnesio de 18 pulgadas, que se superponen a un nuevo equipo de frenos con discos de carbono y los amortiguadores de una suspensión completamente ajustable en cuatro vías.
Por su parte, unido a una transmisión secuencial de seis relaciones, el 6.3 V8 atmosférico tan sólo necesita montar un nuevo sistema de escape y perder de vista el restrictor FIA de la admisión para entregar 680 CV de potencia a 7.250 RPM con un par máximo de 730 Nm a 5.250 RPM.
Un tanque de combustible de competición de 120 litros proporciona stints suficientemente largos como para buscar sus más de 315 km/h de velocidad punta. El interior, dotado con la misma jaula de seguridad del resto de AMG GT3, se permite dos guiños más al venerable SL.
Se habla en este caso del 300 SLR de 1955 que alcanzó la leyenda con Juan Manuel Fangio a sus mandos. De aquel icono toma el tapizado de sus asientos, cuya tela azul a cuadros recubre buena parte de los baquets en fibra de carbono, junto a las empuñaduras en madera a ambos extremos del volante.
Cada uno de los 13 únicos Mercedes-AMG GT3 Edition 130Y Motorsport se venderá por un precio de 1,03 millones de euros en el cual se incluye, además del coche, un casco personalizado por Bell Helmets y un conjunto completo de mono de carreras, guantes, prendas ignífugas y botines firmados por Puma, así como una funda para protegerlo mientras no esté en uso.
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