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Foto del escritorSpeedRacing Comunicaciones

Aston Martin actualiza el Vantage

El deportivo inglés se actualiza profundamente, especialmente por dentro, añadiendo más de 100 CV extra a su V8.



Aston Martin acaba de presentar la nueva actualización del Vantage, el escalón de acceso a la gama de Aston Martin estrena importantes cambios estéticos, técnicos y mecánicos para ser más emocionante que nunca.


La nueva entrega del Vantage presume de una carrocería de aluminio 30 milímetros más ancha y con una presencia más deportiva, siendo sus nuevos grupos ópticos, que abandonan las delgadas lentes en favor de otras más grandes extendidas en vertical, los grandes protagonistas.


Estos integran a la perfección las luces diurnas y exhiben con orgullo la nueva firma lumínica de la marca británica, aunque destaca también la presencia de un capó de nueva factura más plano y con dos aperturas en la parte central, así como un paragolpes rediseñado que incluye más entradas de aire y una parrilla un 38% más grande.


Visto de perfil, se ven unos pasos de rueda más anchos que albergan llantas forjadas de 21 pulgadas, mientras que las aletas delanteras incorporaran como principal novedad el nombre de la compañía en ellas, manteniendo las líneas de estilo y el diseño del espejo retrovisor, pero introduciendo cambios en el diseño de los faldones laterales y los tiradores de las puertas.


Ya en la zaga, un paragolpes más ancho con salidas de aire se acompaña de cuatro salidas de escape de mayor diámetro. De puertas para dentro, el renovado Vantage presume de un interior totalmente nuevo que le acerca, y mucho, al del Aston Martin DB12.


Eso significa que el antiguo sistema multimedia heredado de Mercedes-AMG desaparece y cede su lugar a un nuevo equipo de infoentretenimiento que se apoya en una pantalla táctil de 10,25 pulgadas y dispone de conectividad en línea.


El cuadro de instrumentos digital también es diferente y lo mismo sucede con un volante de nueva factura, muchísimo más atractivo que el anterior. De serie se incluye un sistema de sonido de 390 W y 11 altavoces, aunque de forma opcional se puede optar por un equipo Bowers & Wilkins de 1.170 W de doble amplificación y 15 altavoces.


Mecánicamente el bloque de 4.0 litros biturbo sigue siendo el mismo, aunque introduce perfiles de levas modificados, turbocompresores de mayor tamaño, relaciones de compresión optimizadas y una mayor refrigeración, lo que se traduce en un incremento de 155 CV y 115 Nm.


En palabras más concretas, ahora el V8 produce un total de 665 caballos de potencia y un par máximo de 800 Nm, energía que se envía al eje trasero mediante una transmisión automática ZF de ocho velocidades, que permite impulsar al deportivo biplaza hasta una velocidad máxima de 325 km/h, siendo capaz de alcanzar los 100 km/h desde cero en 3,5 segundos.


Aston Martin dice que esta maniobra se ha mejorado gracias a la presencia de un nuevo sistema launch control. En cuanto a los modos de conducción, son cinco los disponibles: Wet, Sport, Sports Plus, Track e Individual, cada uno de ellos adaptando las calibraciones del tren motriz, la dirección y el chasis.


A nivel de chasis los ingenieros han instalado una serie de refuerzos, entre los que se incluye un travesaño frontal para mejorar el tacto de la dirección y otro ubicado en el vano motor, pensado para aumentar la rigidez torsional y la lateral entre las torretas de la suspensión delantera.


También aparece otro entre las torretas de la suspensión trasera con el que la rigidez en condiciones de carga en curva aumenta un 29%. Con ello, Aston Martin señala que se producen mejoras tangibles de la precisión, el equilibrio y la respuesta de la conducción, junto con un aumento general del refinamiento.


Además, el coche presume de nuevos amortiguadores Bilstein DTX adaptativos inteligentes y una columna de dirección no aislada que mejora el feedback. Su producción dará comienzo en el primer trimestre de 2024 y las primeras unidades llegarán a los concesionarios durante el segundo trimestre de 2024, con un precio que rondará los 200.000 euros, con la variante descapotable añadiendo unos cuantos miles de euros más a la factura final.

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