La nueva bestia de la casa del corbatí llega con más de 1.000 CV de potencia para ingresar formalmente al exclusivo club de los supercars.
Chevrolet ha presentado el nuevo Corvette ZR1 2025, un imponente ejemplar que no pasará desapercibido y todo gracias a su motor V8 biturbo capaz de generar la no despreciable suma de más de 1.000 CV de potencia.
El Corvette ZR1 se presenta con un aspecto realmente extremo, destacando un capó y spliter delantero más agresivos, techo de fibra de carbono, llantas más vistosas y sobre todo un alerón trasero que, como se especulaba, llegará en dos tipos distintos.
El primero de ellos con forma de spoiler de doble ala al estilo como el ya visto en otros modelos de la casa, y por otro, dentro del paquete de alto rendimiento ZTK, un gigantesco alerón trasero que supera incluso al del Z06 y se acerca peligrosamente al de un C8.R o GT3 como el que Corvette Racing lleva en sus coches en competición.
El resultado, junto al resto de piezas aerodinámicas, promete altas cantidades de carga aerodinámica, concretamente dice Corvette más de 544 kg de downforce a velocidad máxima junto a otros elementos como paneles delanteros de fibra de carbono o un splitter delantero también de carbono.
Por lo demás, se aprecia una carrocería que no difiere demasiado del Z06, con una buena parrilla delantera con tomas de aire más grandes en las esquinas del paragolpes, y, alerón aparte, lo mismo ocurre con la zaga, con un formato de escape cuádruple en línea que garantiza un sonido de primera acompañado de su brutal y potenciado motor.
Lo que sí es nuevo aquí es la zona del capó que ahora incluye nuevas entradas de aire y nervaduras que, además de darle un aspecto más agresivo a este superdeportivo, también ayuda a mejorar esa carga aerodinámica delante y de paso llevar aire fresco a la mecánica a través de un intercooler y nuevos conductos para enfriar los frenos traseros.
El portón trasero también cuenta con entradas de fibra de carbono que ayudan respirar a los dos nuevos turbocompresores y sobre todo llama la atención por la luna dividida en dos secciones verticales, lo que le da un aspecto aún más agresivo al conjunto.
En materia mecánica el verdadero protagonista es su propulsor V8 LT7 de 5.5 litros biturbo, una evolución incluso del LT6 de cigüeñal plano que incorpora el Z06 y que da como resultado una demencial cifra de 1.064 CV y 1.122 Nm de par.
Gracias a estas cifras, el nuevo Corvette logra hacer el cuarto de milla en menos de 10 segundos a 241 km/h, mientras es capaz de alcanzar una velocidad fácilmente superior a los 346 km/h.
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