El hypercar impreso en 3D se despoja de sus alerones y aletines para convertirse en un deportivo centrado en la velocidad punta en línea recta.
Czinger ha querido sacar una variante de su salvaje hypercar 21C, pensada para ofrecer la máxima velocidad punta y bautizada con el nombre de Czinger 21C V Max, modelo que difiere en lagunos apartes de su hermano mayor.
El nuevo modelo busca brinda a los clientes la oportunidad de adaptar su misil sobre ruedas para obtener la máxima velocidad en las rectas, logrando una aceleración y velocidad máxima más elevadas, en lugar de tomar curvas.
El Czinger 21C V Max renuncia a la mayoría de los elementos de la carrocería encargados de producir la carga aerodinámica que se encuentra en el 21C estándar, dando paso a un cuerpo mucho menos resistente al aire y suave, según la compañía inspirado en el avión espía SR-71 Blackbirt, que resulta ideal para lograr velocidades máximas más altas.
Czinger ha ampliado el perfil de la cola del 21C y ha modificado el morro para reducir la resistencia lo máximo posible y garantizar la estabilidad; mientras que el tren motriz V8 biturbo de 2.88 litros híbrido permanece sin cambios, entregando una potencia combinada de 1.250 caballos de potencia con una línea roja en los 11.000 rpm, gracias a sus dos motores eléctricos en la parte delantera que proporcionan vectorización de par.
Según Czinger, este 21C V Max es capaz de hacer un 0 a 100 km/h en menos de 1,9 segundos, el cuarto de milla en 8,1 segundos, un 0 a 300 en 8,5 segundos, una velocidad máxima de 452 km/h, y el 0-400-0 en 27 segundos.
Czinger planea construir solo 80 ejemplares 21C en total, cada uno con un precio inicial que supera los 1,5 millones de euros.
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