La casa de Maranello ha creado una versión del coche ganador de las 24 Horas de Le Mans el cual puede estar en tu garage.
Ferrari acaba de hacer algo extraordinario para los llamados Ferrari Corse Clienti, construir una réplica del hypercar 499P, ganador de las 24 Horas de Le Mans, el cual no solo podrá estar en sus garages sino además, poderlo pilotar en famosos circuitos de todo el mundo.
Se llama Ferrari 499P Modificata y a primera vista, parece idéntico al prototipo que venció la mítica carrera el pasado mes de junio, teniendo como única gran diferencia la bandera italiana.
Esta joya ha sido creada por el departamento F1 Clienti y XX Program y le brinda a esos exclusivos clientes dar un paso más allá, dado que hasta el momento a lo máximo que podía aspirar un aficionado de la marca era a conducir en exclusivos eventos, monoplazas de Fórmula 1 que habían pertenecido a la Scuderia.
Ahora, con el nuevo programa Sport Prototipi Clienti, también tendrán a su disposición un Hypercar de Resistencia, tanto o más rápido que los que compiten en el Mundial de la especialidad.
El 499P Modificata no es un coche homologado para competir, nunca podrá ser inscrito en una carrera pues ha sido creado para ser pilotado únicamente en eventos Ferrari y, como los F1 de particulares, será mantenido por mecánicos de la Scuderia.
El calendario de actividades incluye ocho citas en circuitos de renombre en Europa, Japón y EE.UU. durante el año, con la casa italiana prometiendo experiencias muy emocionales, gracias a que el coche tiene mas potencia y prestaciones que el Hypercar de carreras, pues su motor sube hasta los 870 CV frente a los 680 que tiene de tope el Hypercar por norma.
El veterano piloto Olivier Beretta se ha encargado del desarrollo del 499P Modificata durante largos meses, siendo su principal tareala de adaptar el modelo de competición pura a sus futuros pilotos no profesionales.
Prueba de ello es que Beretta y su equipo han conseguido que la tracción total híbrida funcione a cualquier velocidad y que el motor V6 a 120° biturbo, sumado al eléctrico, despliegue todo su poderío, hasta llegar a esos 870 CV finales.
Las suspensiones también han sido modificadas y ahora se han adaptado perfectamente a unos neumáticos Pirelli específicos para el modelo. Los exclusivos propietarios de este coche contaran con algo que los profesionales no tienen, un botón push-to-pass que, durante 7 segundos, ofrece la máxima potencia de los dos motores a la vez.
El programa Sport-Prototipi Clienti tiene un costo de 5,1 millones de euros, que incluye el coche, su custodia y mantenimiento en Maranello, así como dos años de actividades en pista.
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