La nueva SUV sorprende a los amantes del mundo automotor gracias a sus proporciones robustas de desempeño y diseño que ofrecen grandes novedades.
En un evento desarrollado en Malibú, Estados Unidos, la marca japonesa presentó al mundo entero la nueva Mazda CX-90, una SUV que hace parte del plan de expansión de la marca presentado por parte de Mazda Motor Corporation.
El nuevo modelo deleita a los amantes de la conducción Mazda con su estilo único de proporciones más anchas, largas y desafiantes que hacen la combinación perfecta entre el alto rendimiento y un refinamiento de clase mundial.
Como es habitual, Los ingenieros de la marca se enfocaron en el conductor, apelando a sus emociones, donde cada detalle está pensado para generar una conexión perfecta entre el hombre y la máquina.
De esta manera, el nuevo producto incorpora un diseño elevado con acabos excepcionales y cómodos espacios ideales para las familias, así como innovaciones en materia de tecnología y seguridad.
La novedosa SUV incorpora la función Kinematic Posture Control, que se enfoca en garantizar un mejoramiento en el agarre sobre las superficies, haciendo que los ocupantes mantengan siempre una postura natural y acorde a la experiencia de manejo, donde la carrocería ofrece un mejor equilibrio, control y confianza durante las diferentes condiciones de las vías.
Cuenta con un motor Turbo de seis cilindros en línea de 3.3 litros, el cual ofrece 340 caballos de potencia. Este motor también está equipado con tecnología Mild-Hybrid que proporciona mayor eficiencia sin comprometer rendimiento.
También brillaron nuevas propuestas de tren motriz como el e-Skyactiv PHEV, enfocado específicamente para el mercado norteamericano, el cual incorpora una capacidad de respuesta y aceleración ideales para sobrepasar las expectativas del conductor.
Los trenes motrices de la Mazda CX-90 se combinan con una nueva transmisión automática de ocho velocidades que logra una aceleración suave y directa al tiempo que mejora la eficiencia de la transmisión.
Estéticamente su elegancia, a partir de curvas que cambian gracias a los reflejos de luces y sombras, marcan una diferencia que eleva el lenguaje de diseño Kodo a otro nivel. Sus acabados cromados en la parte inferior de la carrocería enfatizan su espíritu desafiante, y sus llantas, de 21 pulgadas, complementan su imponente presencia.
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