El gran SUV de Audi se actualiza a nivel de diseño y tecnología aunque mantiene sus motorizaciones diésel y gasolina mild hybrid, así como la SQ7.
18 años después y tras una última renovación en 2019, Audi ha presentado una nueva actualización de su SUV Q7, modelo que se refresca considerablemente tras recibir un buen arsenal de tecnología y un diseño renovado entre otras novedades.
Estéticamente se presenta una nueva parrilla Singleframe con nueva rejilla con patrón octogonal y un grueso marco plateado, con unas nuevas ópticas que unen el nuevo stilo de luces diurnas superiores y luces principales inferiores en una única unidad unida a la parrilla, creando así un frontal más imponente que antes.
Como en otras renovaciones recientes, Audi ha minimizado elementos decorativos para crear un aspecto más limpio a la vez que añade las nuevas señas de identidad de los modelos de la marca, como el nuevo logo de los cuatro aros más finos, así como la denominación del modelo en la zona del pilar b en las puertas.
Sin embargo el verdadero cambio llega de la mano de unos nuevos faros con tecnología HD Matrix LED con luz láser disponibles como opción, que aumentan significativamente el alcance de la iluminación en carretera, acompañando a las luces diurnas digitales de la zona superior que permiten personalizar la firma lumínica en cuatro opciones.
En la zona trasera por su parte, se estrenan unos pilotos digitales OLED con diversas funciones a nivel de información y estética como la indicación de proximidad o las señales de giro dinámicas.
A nivel de equipamiento y personalización el Q7 también se ha reforzado notablemente, no solo con nuevas opciones de llantas con cinco nuevos diseño con tamaños de 20 a 22 pulgadas, si no especialmente en un interior que ahora incluye nueve inserciones decorativas disponibles y tres nuevos acabados.
A nivel de infoentretenimiento se refuerza con la posibilidad de usar por primera vez aplicaciones de terceros como Spotify o Amazon Music, además de ofrecer actualizaciones constantes del sistema y un market de aplicaciones específicas.
El apartado de seguridad también recibe mejoras con avisos en el mismo Audi virtual cockpit en caso de cambios de carril, de distancia, aparición de otros usuarios de la vía, información sobre semáforos y asistente en cruces, así como el avanzado remote park assist plus, que se ayuda de las cámaras y radares para realizar maniobras de aparcamiento con poco espacio a distancia usando la aplicación myAudi.
Todo esto se aplicará a un interior realmente espacioso disponible una vez más en versiones de cinco y siete plazas con el habitual nivel de calidad de Audi, que garantiza un alto nivel de confort independientemente de si se viaja adelante o atrás.
No se puede olvidar su maletero, que en la versión de cinco plazas será capaz de ofrecer entre 780 litros con los respaldos levantados y 1.908 litros con los respaldos completamente abajo.
En lo concerniente a la mecánica, Audi mantiene una completa oferta de motores que incluye opciones V6 gasolina TFSI y diésel TDI, todas acompañadas de un cambio automático tiptronic de ocho velocidades.
Cuenta también con la famosa tracción integral quattro, un sistema mild hybrid de 48V que ayuda a reducir en hasta 0,5 litros cada 100 km el consumo de combustible, gracias, entre otras cosas, a que permite al modelo circular con el motor apagado durante 40 segundos cuando se levanta el pie del acelerador a velocidades de entre 55 y 160 km/h.
La gama arranca con dos diésel, un 45 TDI quattro de tres litros con 231 CV y 500 Nm de par máximo, capaz de ofrecer un 0 a 100 en 7,1 segundos y 226 km/h de velocidad máxima, al cual sigue un más potente 50 TDI quattro cuya potencia asciende hasta los 286 CV y 600 Nm de par máximo con un 6,1 en el 0 a 100 y 241 km/h.
Por la parte gasolina hay un más prestacional Q7 55 TFSI con 340 CV y un par máximo de 500 Nm, que permiten una aceleración de 0 a 100 en 5,6 segundos y una velocidad máxima limitada a 250 km/h.
En lo más alto de la familia estará de nuevo un Audi SQ7 con motor gasolina V8 TFSI 4.0 con tecnología de desactivación de cilindros con 507 CV de potencia y 770 Nm de par máximo, capaz de hacer el 0 a 100 km/h en 4,1 segundos y de alcanzar los 250 km/h.
Esta familia estará de nuevo acompañada de una puesta a punto y tecnología de primer nivel al servicio del mejor equilibrio entre dinamismo y confort, incluyendo de nuevo una avanzada suspensión neumática con amortiguación adaptativa y un sistema de dirección a las cuatro ruedas también opcional, salvo en el SQ7 donde llega de serie.
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